viernes, junio 24, 2005

sueños


Ayer tuve un sueño… interesante, por que lo “viví” de dos formas diferentes, todo comienza cuando estamos en una casa cinco personas, un hombre y una mujer son los dueños del lugar por así decirlo, hombre es una persona joven de tez blanca y lentes y la chava recuerdo que le llegaba el pelo abajo del hombro recogido en una cola, era de color castaño, lacio. Con migo recuerdo que era otra chava, no recuerdo como era ella y la otra persona no se si era hombre o mujer, nosotros tres estábamos hay en forma de prisioneros o algo parecido, por que no teníamos ningún amarre o algo que nos impidiera salir de allí, en esa casa hay un cuarto al que nos estaban metiendo uno por uno me acuerdo bien que adentro no había nadie pero la simple ida de que nos metieran era estresante, por fin me toco el turno (a fuerzas) de entrar,. Dentro del cuarto yo sentía mi cabeza como si me fuera a explotar, las imágenes que veía son de un cuarto del cual no lograba ver las paredes, por que en su lugar había mucha, muchísima sangre, podía escuchar susurros lastimeros, gritos eran imágenes impresionantes se sentía una gran desesperación dentro de ese cuarto, de repente comenzaba a ver aun con los ojos cerrados los detalles del cuarto, comencé a ver como quería aparecer o salir de entre la sangre un rostro de una mujer con una expresión y un sentimiento de dolor, angustia, desesperación, podía oír sus gritos, podía sentir su angustia, su miedo. Hasta que llego un momento en que cambio la escena, ahora la que estaba dentro era la chava que venia con migo, a pesar de que era mi sueño, podía sentir diferente el miedo, el dolor, la desesperación ahora el rostro se ve mas claro, puedo distinguir que es el de una mujer joven, aun así puedo sentir el miedo, la desesperación, hago hincapié aquí por que recuerdo bien que sentía mi cabeza a punto de estallar, pero no por que me doliera, sino por el como se sentía. Cuando se torno casi insoportable medio quise despertar, pero lo que paso es que se regreso el sueño al momento en que mi compañera estaba entrando, ahora era como si pudiera hablar con ella, le decía lo que iba a ver, a escuchar, a sentir, cuado entro yo podía ver lo que ella, pero ahora no sentía nada, después de un rato desperté.

Me causo una impresión el ver tanta sangre, no poder ubicar bien las paredes y el como sentía mi cabeza, fue muy interesante.

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